En todo ámbito profesional u oficio el mantenimiento que se realice a tiempo a los equipos, implementos y herramientas que se suelen utilizar es importante. Esto permite la conservación del mismo y a su vez el buen funcionamiento. Por ello cuando se habla de los métodos de seguridad no es descabellado usar esa palabra.
Los métodos de seguridad que suelen utilizarse como resguardo a los bienes materiales así como a la vida misma, van desde los más sencillos a los más complejos. Podemos hablar desde un candado, hasta puertas de seguridad blindadas, como de rejas, ventanas, es decir hablamos inclusive de domótica.
Pero también se habla de inmótica, donde los servicios de mantenimiento suelen ser más complejos aun. De los diferentes tipos de mantenimiento nos puede hablar un cerrajero, siempre va a dar la recomendación acertada, teniendo en cuenta las áreas a resguardar y los embates de uso y clima al que son expuestos estos sistemas.
Problemas comunes en el uso cotidiano de los bombines
Los bombines son las herramientas de uso a las que suele dársele mayor uso, inclusive más que a los diferentes métodos de seguridad aplicados con frecuencia en una vivienda, vehículo o empresa. Esto porque son los que mantiene en forma más efectiva a los otros métodos aplicados a un área o bien.
Suelen sufrir por la constante fricción, por los embates del clima, muy caluroso o muy frio, el polvo, el dejar las llaves dentro del bombín por mucho tiempo. Estas son causas de diferentes. Por ello la suciedad se va acumulando dentro del mismo. Ocasionando que micro partículas le resten efectividad al servicio que deben prestar.
Las llaves deterioradas son otro efecto contraproducente para el bombín o cilindro. Ya que el sistema interno suele verse forzado. Una puerta mal cuadrada o la expansión de los metales en puerta o marcos de puertas suelen causar también problemas a la hora de utilizar los mismos.
Mantenimiento oportuno y efectivo
Como hemos mencionado anteriormente el mantenimiento es indispensable para el buen funcionamiento del bombín, por ello se recomienda hacerlo por lo menos cada seis (06) meses, usar lubricación ideal para ello, por ejemplo debe permitirle la limpieza de esas partículas que se acumulan en el interior del mismo.
También protege todo el sistema interno del bombín, permitiéndole que las llaves suelan entra con facilidad y realicen los pases para los que están diseñados. Cuando se utilizan los lubricantes apropiados se evitan tanto la corrosión como el óxido, alargando la utilidad del mismo.
La forma correcta de realizar la limpieza del mismo es desmontando el bombín, usar un paño con el lubricante seleccionado, frotarlo por fuera de la pieza y con otro paño retirar algún residuo, en el interior del bombín, se debe introducir la cánula limpiadora y con la llave retirar los excesos hasta que la misma salga limpia completamente.
De esta forma se puede estar seguro que la función para la que fue colocado el bombín realizara de forma correcta y apropiada su labor, permitiéndole al cliente tener la certeza que su seguridad está garantizada.